ACTUALIDAD SEMANAL DEL MERCADO DEL ACEITE DE OLIVA
El mes pasado, los datos de la AICA informaron que la nueva producción de la cosecha sigue siendo baja, mientras que la demanda interna y de exportación supera las 80,000 toneladas. Las lluvias recientes han retrasado la cosecha, resultando en rendimientos más bajos en algunas áreas. Sin embargo, se esperan volúmenes significativos de cosecha en noviembre y diciembre, tradicionalmente los meses pico de la temporada.
Jaén está produciendo mayores volúmenes de aceite de oliva de buena calidad, con un tercio de los molinos ya elaborando aceite temprano. Los precios del aceite de oliva virgen extra aumentaron ligeramente a 5,21 €/kg, y el aceite lampante se situó en 4,72 €/kg. El mercado en España parece haber detenido su tendencia a la baja previa, con precios comenzando a recuperarse.
La producción de aceite de oliva enfrenta actualmente desafíos debido a la antracnosis del olivo, también conocida como "aceitunas jabonosas" (Colletotrichum gloeosporioides). La humedad prolongada causada por las intensas lluvias ha favorecido la propagación de esta enfermedad, afectando significativamente tanto el rendimiento como la calidad. Los aceites impactados por la antracnosis presentan alta acidez y un tono anaranjado, lo que ha resultado en precios más bajos en el mercado y un aumento en la oferta de aceite lampante.
Los precios del aceite de oliva disminuyeron significativamente en las últimas semanas, incluso cuando las reservas bajaron a 104,740 toneladas, un 26,3 % menos en comparación con el año pasado. Sin embargo, los precios han repuntado recientemente a 9 €/kg, impulsados por la incertidumbre en torno a los rendimientos de la nueva cosecha y las reservas reducidas de la campaña anterior. Con la cosecha prevista para concluir el próximo mes, el mercado sigue siendo volátil, ya que los informes contradictorios de fuentes nacionales e internacionales añaden confusión. Muchos mercados aún no han proporcionado cotizaciones firmes para la nueva producción.
La falta de lluvias tempranas inicialmente retrasó la cosecha, pero las lluvias recientes han mejorado los rendimientos del aceite y acelerado las actividades de recolección. A medida que la producción se intensifica en todo el país, los precios, que habían estado cayendo, ahora se están estabilizando. Se anticipa que el mercado alcance un equilibrio en diciembre a medida que avanza la cosecha.
Límites de esteroles y el futuro de los aceites de oliva premium
La legislación actual sobre los esteroles totales en el aceite de oliva virgen extra (AOVE), que establece el límite legal en 1000 mg/kg, tiene un impacto significativo en el mercado, especialmente en lo relacionado con la clasificación y comercialización de los aceites. Según investigaciones, este límite, establecido hace más de 30 años, se ha vuelto poco fiable debido a los cambios en las prácticas de producción, como el auge de los aceites monovarietales y los efectos del cambio climático.
Los AOVE monovarietales, especialmente de cultivares específicos como Coratina y Nocellara del Belice, a menudo están por debajo del umbral de 1000 mg/kg debido a su contenido naturalmente bajo de esteroles, lo que puede llevar a que estos aceites sean clasificados como no conformes y degradados a aceite vegetal genérico. Además, las condiciones climáticas, particularmente el aumento de las temperaturas, y las prácticas de cosecha temprana destinadas a mejorar la calidad sensorial y sanitaria de los aceites, pueden reducir aún más las concentraciones de esteroles.
El límite legal para los esteroles totales, que no se ha actualizado a pesar de los cambios en la composición del aceite de oliva y las prácticas agrícolas, crea una paradoja en la que los aceites de alta calidad, especialmente los de cultivares específicos o cosechados temprano, pueden no cumplir con los requisitos de pureza. Es crucial que las regulaciones se actualicen de manera estratégica, ya que el cambio climático y la tecnología están influyendo significativamente en la producción alimentaria.
El mercado mediterráneo del aceite de oliva se está estabilizando tras las lluvias recientes, aunque persisten desafíos como la antracnosis del olivo y la regulación obsoleta de los esteroles. Adaptar los estándares para alinearse con las prácticas modernas y las realidades climáticas es esencial para apoyar a los productores y preservar la calidad de los aceites de oliva premium. Equilibrar la tradición con la innovación será clave para garantizar un futuro sostenible para el sector.
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